En esta nueva era, Lights abraza aún más sus influencias favoritas de darkwave, con una dirección musical que será bien recibida por sus fans del pop y del indie-alt por igual. “DAMAGE” es una apropiada primera escucha de la autoproclamada “chica triste más feliz”.
Ella explica la dualidad psicológica detrás de la canción: “En los últimos años me he encontrado explorando qué partes de mi identidad son realmente yo, y cuáles son una respuesta a la forma en que todos hemos sido condicionados por nuestras circunstancias presentes, ya sea moldeadas por las increíbles presiones de las redes sociales o por las expectativas modernas. A veces doy un paso atrás y pienso: ‘¡Juro que no soy yo!'”.
El video muestra a Lights cortándose el cabello largo, soltando física y simbólicamente el ‘daño’.